Vive la experiencia del salón de blues más antiguo de Mississippi en Jackson

Los "juke joints", también conocidos como bares, son pequeños locales improvisados que servían como clubes sociales en la década de 1940. Después de una larga jornada de trabajo, la gente de la comunidad venía a estos sitios con sus instrumentos, muchos de ellos de fabricación casera, para compartir historias y tocar juntos en el escenario. Blue Front Café, inaugurado por Mary y Carey Holmes en 1948, es la representación viviente más antigua de la historia del sur de Estados Unidos.

Blue Front comenzó como un lugar en el que los vecinos se reunían para compartir matalote (un pescado muy grande) y bebidas, bailar al ritmo de música en vivo e, incluso, cortarse el pelo. El hijo de Mary y Carey, Jimmy "Duck" Holmes, es el propietario actual de Blue Front, y este sigue siendo unos de los sitios de blues más populares de Mississippi. El mismo Duck es una leyenda viviente: es el último intérprete sobreviviente del estilo de blues Bentonia, un estilo que se caracteriza por emplear acordes menores principalmente. Duck se aseguró de que todos supieran del Blue Front en el Mississippi Blues Trail (Ruta del Blues de Mississippi) y sigue estando vigente.

Sentarse y pedir una zarzaparrilla con helado en Brent's Drugs es otra experiencia única en Jackson que pareciera no haber cambiado con los años. Brent's Drugs abrió sus puertas en octubre de 1946 como parte del primer centro comercial de Mississippi y, aunque la relación entre una fuente de soda y una farmacia no sea obvia hoy en día, ambas tiene una historia en común. Cuando los camareros perdieron su trabajo durante la Prohibición, pusieron fuentes de soda en las boticas y trabajaban como "soda jerks", ofreciendo bebidas mientras los clientes esperaban sus recetas. Aunque Brent's ya no despache recetas médicas, sí mantuvo la fuente de soda original y conservó la gran parte de la decoración interior y los muebles originales.

Si quieres disfrutar de la escena artística local, visita Offbeat, una especie de galería de arte y tienda de discos combinadas. En el sitio, entre los estantes de discos, los juguetes de diseñador y las novelas gráficas, hay una galería de arte en la que se exhiben los trabajos de artistas locales. Cedric admira un mural hecho por algunos de los artistas emergentes de Jackson y queda claramente sorprendido por el talento auténtico. "Hay mucha cultura en Jackson".

Con su aprecio por el pasado y su interés en promover una nueva energía creativa, es obvio que Offbeat alimenta el estilo de vida moderna de Jackson.

Es cierto: a la gente de Jackson le gusta tomarse su tiempo en la cocina y en las carreteras. Mantienen conversaciones educadas, llenas de encanto sureño. Puedes contar con pasteles de pacanas y saludos escritos a mano por los vecinos cuando te enfermas, y el aire es realmente denso y dulce como la melaza.

A diferencia de tantos lugares obsesionados con el futuro, Jackson es una ciudad con una memoria viva. Sus habitantes se sienten orgullosos, y han decidido pasar sus vidas allí. Y sigue siendo uno de los pocos lugares en Estados Unidos donde se puede obtener una lección sobre su historia de primera mano de casi cualquier persona con la que te cruces en la calle.

Hay una sensación de orgullo y una serenidad en Jackson, que puede ser la razón por la que nadie tiene prisa. Sentado en un porche, guitarra en mano, Burnside reflexiona: "Me siento orgulloso de Mississippi. El blues verdadero no podría existir sin él. El amor y la energía que surgen de la tierra son ricos y hermosos en las historias de la música. Me quedaré aquí tocando mi guitarra para siempre".